| Oh glorioso San Pancracio que
 en la hermosa juventud, que tan rica y halagadora se presenta
 para vos con las promesas del mundo, sin embargo renunciasteis
 magnánimamente a todo para abrazar la Fe y servir a nuestro
 Señor Jesucristo con gran ardor de caridad y con profunda
 humildad, y por El ofrecisteis alegremente vuestra vida con un
 sublime martirio, escuchad, os suplico, mi plegaria ahora que
 sois tan poderoso delante de Dios. Obtenednos una viva fe que
 nos sirva de luz mientras peregrinamos en este mundo; un ardiente
 amor a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a
 nosotros mismos. Alcanzadnos también espíritu de
 desprendimiento de los bienes de la tierra y desprecio de las
 vanidades del mundo; y humildad para practicar ejemplarmente
 la vida cristiana. Os rogamos igualmente de un
 modo especial por los jóvenes. Acordaos que sois patrono
 de la juventud; llevad, por lo tanto, al Señor a todos
 los jóvenes, convertidos en puros y fervorosamente piadosos
 por vuestra intercesión. Obtenednos a todos la felicidad
 del Santo Paraíso. Así sea. Padrenuestro, Avemaría
 y Gloria. |